Detectores de humos y gases
Las personas postradas, con deterioro cognitivo, con problemas de comunicación o enfermedades que les impidan actuar y dar la voz de alarma, son susceptibles de ser víctimas de estas incidencias. La instalación de detectores de humos y gases, permite que los usuarios (los propios dependientes, así como sus familiares) estén tranquilos respecto a escapes o incendios. Las personas que se encargan de la atención a los dependientes, acudirán de inmediato a la voz de alarma. Los detectores de humos y gases son instalados en el techo o en lugares discretos, de manera que no irrumpen negativamente en la decoración del lugar. La tecnología está de parte de las personas dependientes no solo mediante estos dispositivos.
También pueden adquirirse detectores de caídas, otra de las posibilidades que se facilitan para la mayor protección de las personas mayores y/o con movilidad reducida. Estos pacientes pueden sufrir caídas y para ello, deben incorporar detectores de caídas, que poseen acelerómetros que avisarán de un movimiento inusual a la persona a cargo del dependiente.
Las viviendas de ancianos y/o enfermos deben estar adaptadas totalmente a sus necesidades especiales. Uno de los aspectos fundamentales es la higiene, y para ello se proporcionan instalaciones de duchas especiales para personas con movilidad reducida... platos de ducha extraplanos y con recubrimiento antideslizante... espacios que además integrarán agarraderos, barras y otros elementos de seguridad para evitar caídas e incidencias.